viernes, 11 de mayo de 2012

Fregaderos y residuos I






En este post, vamos a dar un pequeño giro a los últimos temas tratados. Ésta vez hablaremos de los fregaderos y de la gestión de los desperdicios y residuos que se generan en la cocina. Aunque no tiene mucho que ver con  las novedades o las tendencias del diseño de interiores, ni con las propuestas expuestas en los post anteriores, si que hay conceptos comunes que, de alguna manera, caminan en la misma dirección.
Os vamos a dejar imágenes que permiten analizar la evolución de la zona de lavado en la cocina, así como la importancia que , hoy en día, se está dando a la gestión de los desperdicios que generamos cada día con nuestros trabajo en la cocina.  
El fregadero es el lugar de trabajo más importante de la cocina. De hecho, según los expertos, el 60% del tiempo que pasamos en la cocina, lo hacemos en el fregadero: y es que preparar, lavar y cortar alimentos, son tareas tan importantes que las realizamos siempre con nuestras propias manos y, en escasas ocasiones, las dejamos en manos de máquinas que lo gestionen.
El reparto del espacio de los fregaderos de forma racional, ergonómica y práctica es cada vez más importante para el usuario y los fabricantes, han tomado buena nota y cada vez, nos ofrecen soluciones más completas, que hacen que nuestras tareas diarias sean más ágiles y cómodas.

En el post de la semana próxima os dejaré enlaces a los fabricantes más representativos de estos centros de lavado y veremos también, los avances que se están logrando en los accesorios para gestionar los residuos que generamos en la cocina. Sobre todo los accesorios que se adaptan a nuestros muebles y que podemos integrarlos sin tenerlos en el exterior y a la vista.



En las imágenes inferiores, podremos ver como se imponen los materiales que simplifican las tareas de mantenimiento en los fregaderos, así como el orden y la comodidad para que nuestras tareas estén perfectamente planificadas y desarrolladas.







Cubetas adicionales que facilitan nuestro trabajo. Preparamos los alimentos y situamos cada utensilio en su lugar adecuado. Orden y comodidad.








Pureza de lineas. El fregadero se integra en las encimeras y se complementa con accesorios de todo tipo. Además, disponemos de multitud de posibilidades tanto en tamaños como en acabados. Los fabricantes nos proporcionan materiales que responden al máximo frente a los agentes químicos de los detergentes que utilizamos a diario en la cocina.




                           



Podemos optar por la sujeción del fregadero por la parte inferior de la encimera. Esto facilita la limpieza de la misma, a la vez que nos proporciona una sensación visual más amplia de la propia encimera.









Ejemplo de sencillez, comodidad y, sobre todo, higiene y orden. Los fregaderos se transforman y pasan a formar parte del diseño más especial de nuestra cocina. Comodidad y limpieza sí, pero también diseño y exclusividad.









Se imponen las tendencias minimalistas. Los fregaderos también se adaptan a las nuevas tendencias y evolucionan al mismo ritmo.







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