<h1>Muebles, colores y tendencias minimalistas</h1>

El minimalismo no parece tener final y nos gusta disfrutar de su evolución. Necesitamos espacios que nos regalen libertad y nos concedan el privilegio de disfrutarlos por si mismos. 

Los muebles, el atrezzo y todo lo que compone ese espacio ha mutado y ahora, forma parte de él. Con el minimalismo, necesitamos unificar materiales y elementos decorativos para transmitir orden, sobriedad, elegancia... Al tiempo, lograr ambientes acogedores y bien estructurados, supone todo un reto. Afortunadamente, hoy los nuevos y muchos materiales para trabajar revestimientos y para construir proyectos decorativos, han evolucionado enormemente y disponemos de multitud de argumentos para combinar todos estos conceptos y obtener unos resultados espectaculares.

Cualquier detalle puede adaptarse a diferentes estilos decorativos. En el minimalismo, este concepto se nos antoja fundamental. Buscar ese punto de originalidad para romper la "frialdad" que puede originar un espacio decorativo muy minimalista, tiene su gracia y puede ayudarnos a mejorar el resultado final.

Las imágenes inferiores hablan por si solas. Cada detalle de éstas, nos parece interesante y a la vez, el resultado del proyecto global, resulta cuando menos, original y atractivo.

Espectacular. Sólo el verde de la alfombra rompe el colorido de este espacio. Cocina, que se intuye al fondo, mesa y salón. El uso en consonancia de las mismas tonalidades en revestimientos y complementos, tanto decorativos como arquitectónicos, es suficiente para conseguir la uniformidad que vemos.

Cocinas con tendencias minimalistas en las que los colores no abundan mucho. El blanco y los detalles en maderas son, de nuevo protagonistas. Pureza en la linea del mobiliario y tonalidades sobrias para conseguir espacios y ambientes limpios y carentes de superficies con texturas diferenciadas.

La imagen superior y la inferior, corresponden a un ático en Viena.

Nos gusta.

La ausencia de color y el uso de las mismas tonalidades en paredes, muebles, suelos, techos y complementos, vuelve a ser esencial. Minimalismo y tendencia. La decoración, se reduce a la mínima expresión.
El espacio cobra todo el protagonismo y los elementos que lo ocupan se "esconden" para integrarse con el revestimiento y acentuar la sensación de volumen. 

El blanco crece y se lleva a su máxima expresión. Cocinas con electrodomésticos integrados y muebles que se pierden y desaparecen. El minimalismo continúa con fuerza y se diversifica.

Nos gusta ver espacios y amueblamientos que se confunden y se convierten en un todo. Decoraciones pensadas para estar y desaparecer. Cada pieza tiene su función, decorativa o práctica. 

Una pasada...

Apenas se combinan diferentes colores. Como ya hemos comentado, el blanco y las maderas se imponen.
Combinaciones de distintas tonalidades de blancos con maderas "secas" empiezan a ser más habituales. Los colores intermedios se utilizan menos.Triunfan los robles naturales o beiges, encalados blancos, abedules claros, etcétera. En el otro extremo, el roble ceniza, nogal, cerezos oscuros y wengués completan el abanico de tendencias para las combinaciones más actuales.